El uso de cremas ó cosméticos se remonta al principio de la humanidad.
Cleopatra era una gran consumidora, le traían cremas y ungüentos en envases de madera hasta Egipto desde lugares remotos. Algunos de sus ingredientes eran el Aloe Vera, cera de abejas, aceite de Karite.
En Grecia y Roma también había auténticos expertos en cosmética natural y doncellas que cuidaban con esmero a las consumidoras. Podrían ser las primeras esteticistas de la historia.
Todas esas formulaciones, esos ingredientes, esas plantas, ceras, aceites, se siguen utilizando en los cosméticos de hoy en día porque está comprobado que mejoran la piel, pero en estos tiempos donde la tecnología se fusiona con la tradición encontramos productos que trabajan sobre expresión genética, detrás hay grandes científicos, conocimiento, I+D y sobre todo consumidores que demandamos este tipo de cosmeticos.
Vivimos muchos más años que aquellos primeros consumidores de hace 2000 o 3000 años, los tiempos se adaptan a las necesidades y ahora queremos estar jóvenes, no nos importa cumplir años pero si estar jóvenes.
